CESPED EUROPEO – Imparable
Apple
acaba de anunciar que ha vendido más de 10 millones de unidades del iPhone 6 y
iPhone 6 Plus en el primer fin de semana que han salido al mercado. El nuevo modelo de iPhone se puso a la venta
el pasado 19 de septiembre simultáneamente en 10 países, más concretamente en
Estados Unidos, Alemania, Australia, Canadá, Francia, Hong Kong, Japón, Puerto
Rico, Reino Unido y Singapur, por lo que en tan sólo tres días Apple ha
conseguido un nuevo récord al llegar a esta impresionante cifra de ventas.
En
Septiembre del 2007 Jose Mourinho abandonaba el banquillo del Chelsea, club al
que llegó en verano de 2004 tras haber ganado la Liga de Campeones con el
Oporto. Al día siguiente del episodio
que nadie quería, el entrenador fue al vestuario, los juntó a todos, les dijo
que se iba y los abrazó, uno por uno. De todos los jugadores Didier Drogba fue
uno de los más afectados, lloró como un niño, contaría después Paulo Ferreira,
ex-futbolista portugués. Así termino
temporalmente la relación entre uno de los jugadores emblemas de la revolución
blue y el entrenador experto en fútbol vertical, el mismo que explota al máximo
a los delanteros de tranco largo que juegan al espacio.
Desde
Didier Drogba, el conjunto londinense no conseguía un goleador que lograra
realmente apuntalar la ofensiva blue y Diego Costa ha comenzado a erigirse en
el verdadero remplazo del marfileño, tanto así que Fernando Torres, Romelu
Lukaku y Samuel Eto'o ya han dejado Stamford Bridge. El mismo Mourinho reconoció que le ha
sorprendido el inicio de temporada de Costa (7 goles en las primeras 5
jornadas), pero también señaló que la fuerza y la potencia del ariete nacido
en Brasil ya justificaron la paciencia del Chelsea para esperar ficharlo en
lugar de buscar en el mercado de invierno un objetivo alternativo.
Diego
Costa ha rebatido todas las teorías que hablan sobre la adaptación al cambiar
de ciudad, a un nuevo vestuario, idioma, cultura o cualquier otro tema que
normalmente afecta a los debutantes en Inglaterra y es que un delantero que
asegure goles, que sea capaz de competir contra todo tipo de defensas es una
bendición para cualquier equipo, o si no que se lo pregunten a Brendan Rodgers
cuando tenía a Luis Suarez; el conjunto de Anfield se metió en la pelea por la
Premier con una defensa que permitía muchos goles pero que era compensada por
la enorme producción goleadora del tridente que comandaba el uruguayo, entonces
ahora, ilusiona mucho a los seguidores azules la llegada de un killer como el
hombre de Lagarto a sabiendas que ya dormían plácidamente con la solides
defensiva expuesta por su equipo en las últimas temporadas.
Tanto
la compañía de Cupertino como el hispanobrasileño están imparables. No podemos
desconocer que la conexión del goleador con Cesc Fábregas mas el aporte
descomunal en la portería de Thibaut Courtois hacen del Chelsea una plantilla completa,
casi de ensueño, con máxima calidad en todas y cada una de las líneas pero la culpa
de que el Chelsea imponga más miedo que respeto en este inicio de campaña es
enteramente de Diego Costa, un delantero a quien le beneficio mucho que la
evolución del fútbol de la Premier tenga más que ver con los centrocampistas técnicamente
superiores que con los defensas centrales de bajo nivel, pesados y lentos. Ahora vemos a Román Abramovich más sonriente
y a Mourinho frotándose las manos.
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