Muchos goles para tan poco fútbol en el Sánchez Pizjuan. Los de Unai Emery entran en zona Champions momentáneamente mientras que el Granada, que necesita reaccionar ya, se ve más cerca del descenso.

   Ya son nueve jornadas las que lleva el Granada sin conocer la victoria. Pero más preocupante que los resultados, son las sensaciones. Hoy, ante el Sevilla, se ha visto un equipo nulo arriba, sin nada que ofrecer ni nada a lo que aspirar de cara a puerta contraria. Y en cuanto al estado anímico, se ha visto muy decaído a los jugadores en los minutos finales, donde han caído la mayoría de los goles. 
El conjunto rojiblanco se enfrentaba al Sevilla en un derbi andaluz caracterizado por la situación atravesada por los dos clubes. Casualidades de la vida, desde la visita al Nuevo San Mamés, los dos equipos venían cosechando malos resultados (el Granada, 8 partidos sin conocer la victoria, desde la jornada 4 con el 0-1 al Athletic).
El arranque del partido no fue nada bueno para los dos equipos. El Sevilla llevaba el control del partido, y el Granada se limitaba a defender. Cuando buscaba alguna situación de peligro, era interceptado por la zaga hispalense. 
El marcador se abrió en el minuto 23: jugada controvertida en el área de los visitantes, en la que Bacca termina rematando en el área pequeña al fondo de la red. Se pedía una posible falta a Roberto por bloqueo, ya que aunque no tenía la pelota en su poder, el portero granadinista se vio obstaculizado en el área pequeña por dos jugadores del Sevilla, y no pudo interceptar el balón. 
El Granada reaccionó bien y en el minuto 40, tras una jugada de estrategia en una falta al borde del área, Piti centra y la pelota da en las manos de M’Bia. Penalty claro que transformó El Arabi. Así se llegó al descanso. 1-1 y poco juego.

Bacca, el hombre del partido con dos goles. Vía marca.com



Sin embargo, en la segunda mitad el Sevilla aumentó su dominio con la posesión, y el Granada lo pasó mal, ya que no propuso ninguna alternativa al planteamiento inicial. 
En el minuto 65, otro barullo en el área dio el segundo gol a los sevillistas. Un remate acrobático de Banega dio en la cruceta y cayó muerto en el área del Granada. Nadie atinó a despejarlo y fue el propio Banega quien lo colocó lejos del bosque de piernas. 
Este gol fue el punto de inflexión del partido. El Granada intentó durante los minutos posteriores al gol llevar la iniciativa. Pero, nada más lejos de la realidad. Este cambio de mentalidad propició espacios en el campo de los rojiblancos que fueron aprovechados por los del Sevilla. Tanto es así que Bacca marcó en el 77 el tercero. Centro desde la banda derecha de Reyes, que controla el colombiano y fusila a Roberto cerca del área pequeña. 
Tras el tercer gol sevillista, los jugadores granadinistas bajaron los brazos, y dejaron de estar presentes en el partido. Siguió el ataque hispalense. Continuó la inofensividad atacante del Granada. 
Los otros dos goles, sendos remates a placer de M’Bia y Gameiro respectivamente en los minutos finales de encuentro. 


El Granada se vuelve a casa con una mano delante y otra detrás. No le queda ni el poder decir que lo intentaron. Estuvieron desde el 2-1 fuera del partido, y no dieron en ningún momento sensación de peligro arriba. Se agudiza por tanto la situación del equipo de Caparrós. 3 puntos de 27 posibles hablan definen el estado de forma del equipo. Además, con 7 goles en 13 partidos es el equipo menos goleador de la Liga BBVA, y solo el Llagostera le iguala en la Liga Adelante. Datos preocupantes para un equipo que aspiraba a grandes cosas a principio de temporada, pero que la falta de motivación y actitud le está haciendo caer a los últimos puestos clasificatorios, creando un descontento general en el entorno del equipo.