Saúl, marcando de chilena el pasado sábado en el Calderón
(Foto: clubatleticodemadrid.com)
Decía Simeone al término del partido del pasado sábado entre Atlético y Real Madrid, que Saúl Ñíguez “era un jugador muy importante para el futuro del Atlético”. Y tiene razón. Creo. Sustituyó a Koke, lesionado éste, en el minuto 10 del choque y cuajó un partido sensacional, culminado con un impresionante gol de chilena.
 
Pero no es (sólo) el gol. Es la sensación de que, dándole el tiempo adecuado, puede ser un jugador tan relevante como lo es hoy Koke. Con características diferentes, claro, pero fundamental para el futuro. Saúl empezó de mediocentro, en el Rayo jugó muchos partidos el pasado año como central, Simeone lo utiliza, generalmente como interior ante las ausencias o descansos de Koke o Arda…
 
Pero la impresión que da es la de poder llegar a ser lo que los ingleses llaman un centrocampista “box-to-box” (de “caja a caja”, de área a área), es decir, capaz de recoger la pelota de sus centrales, casi en su propia área, combinar con sus compañeros en el mediocampo y llegar a posiciones de remate en el área contraria, con notable efectividad.
 
Cierto es que no es nada fácil entrar en el once titular de este Atlético y cuentan que, ante la falta de minutos, quiso marcharse en Diciembre pero, como insiste Simeone cada vez que le preguntan al respecto, “es joven, debe tener paciencia, luchar y aprender”.
 
Hasta aquí, salvo este “pequeño” detalle de la falta de minutos, todo parece ideal: si el Atlético consigue retener a Koke (no dejarán de llegar ofertas por él), tendrá una pareja de centrocampistas para “media vida”; si no, tiene el recambio en casa.
 
Sin embargo, como (casi) todo en el Atlético, todo en el Atlético, esto esconde un gran fallo. Desde que lo gobiernan Gil&Cerezo, el Atlético no es un club de fútbol, es una agencia de compraventa de jugadores, con fines, cuanto menos, dudosos. Y, en el caso que nos ocupa, parece ser que el 40 % de los derechos de Saúl son de Peter Lim, dueño del Valencia.
 
¿Y qué hacer ante esto? Como digo, los intereses en los fichajes y ventas del Atlético no son nada claros en los últimos años pero, dado que el Atlético tiene un nuevo accionista de referencia, el grupo chino Wanda, y que éste parece dispuesto a invertir dinero en reforzar la plantilla, bien harían en recomprar ese tanto por ciento de Saul a Peter Lim 
 

 

Si yo fuera parte del consejo de administración del Atlético, sería una de las primeras operaciones que haría una vez se lleve a cabo de forma definitiva la ampliación de capital. El 40 % de un chico con este futuro no puede andar en manos de quien tiene toda la pinta de ir a convertirse, tras unos años oscuros, en un sólido oponente en todas las competiciones: Peter Lim y “su” Valencia.
 
Peter Lim y el grupo Wanda, entre ricos anda el juego.