Mundial .- Esta semana toca hablar de la que fue mi primera gran decepción en el mundo del fútbol, y no es otra cosa que el papel de España en el Mundial de Francia 1998. Este fue el primer mundial completo que recuerdo, ya que de Estados Unidos 1994 únicamente tengo vagos recuerdos ayudados por resúmenes posteriores que he visto.
Aquel mundial fue especial para mí, Con 10 años, recuerdo haber visto bastantes partidos, todos los que pude claro está, y haber quedado maravillado con los jugadores que vi. Por aquel entonces poco entendía de la maldición de cuartosde España, y creía, como cualquier chiquillo, que mi selección era la que acabaría ganando ese mundial, el primer mundial para España que, como sabemos, no llegaría ese año.
El primer partido de España en el Mundial de Francia 98 le vi con familiares y amigos en un restaurante. Habíamos quedado para comer todos juntos y poder disfrutar del que creíamos iba a ser un gran partido. Desde el inicio, con himno de Españaincluido, y pese a que no jugábamos con la camiseta azul que me habían regalado y que llevaba puesta, sentí un gran cosquilleo en el estómago, que se acentuó con el gol de Hierro de falta en el minuto 20. Pero esa alegría duró bastante poco, unos cinco minutos, justo cuando Nigeria botó un corner que no supimos defender y que Ferrer, en el primer palo no pudo despejar. Tranquilo, esto se arreglará, me dije, pero la primera parte acabó con ese 1-1.
Con los nervios a flor de piel comenzó la segunda mitad, y qué manera de comenzar.Hierro conducía un balón en el centro del campo hasta que vio el desmarque de Raúl, a quién le puso un balón en largo tan preciso, que el por entonces 10 de España remató con una gran volea al fondo de las redes. Qué manera de gritar y celebrar ese gol, pensé que estaba todo hecho, pero no fue así. Mediada la segunda parte, un ataque de Nigeria por la banda izquierda acabó con el famoso gol en propia puerta de Zubizarreta. Una pena que su carrera en la selección acabara de esa forma. Pero para más mala fortuna, unos minutos más tarde un rechace al borde del área lo recogió un jugador nigeriano para transformar el 2-3 definitivo. Vaya varapalo más duro me llevé.

Para el segundo partido, Javier Clemente hizo cinco cambios contra Paraguay, concentrados, sobre todo, en el centro del campo y la delantera. El experimento no le salió muy bien que digamos, puesto que no conseguimos marcar un solo gol a los paraguayos, que venían de otro empate a 0 ante Bulgaria en la primera jornada. En el otro partido del grupo, por el contrario Nigeria ganaba 3-1 a Bulgaria, lo que nos dejaba con un pie fuera del mundial, aunque por entonces yo no sabía por qué.

Aguilera y Celades tras el empate contra Paraguay que nos dejaba en mala posición (Foto Que.es)

 

 Y es que no dependíamos de nosotros mismos. Nigeria y Paraguay podían dejar fuera aEspaña, y así fue. De nada valió el festival de goles que nos dimos contra Bulgaria (6-1) porque Paraguay ganó 1-3 a Nigeria y ambos pasaron a octavos de final.Aún así, no me enteré de esto hasta el final del partido y disfruté como el enano que era con los goles de Hierro, Luis Enrique, Morientes (2) y Kiko (2). La verdad es que fue peor así, ya que fue duro el golpe de pensar que estábamos dentro a saber que estábamos eliminados.