oño fue el héroe rayista en el encuentro ante el Valencia (Marca)

Por fin comenzó la nueva temporada. El fútbol ha vuelto a colarse en las viviendas, trabajos y demás lugares donde hablar de tu equipo favorito, o el ultimo fallo arbitral, o si este año será el de Messi o Cristiano…

Por Vallecas el curso arrancó de manera positiva. El equipo consiguió un valiosísimo empate ante un Valencia que esta misma semana confirmó su presencia en la próxima Champions League. Este empate dejó un nombre por encima del resto. El portero local Toño, que detuvo un lanzamiento del ex jugador franjirrojo Negredo a bocajarro en el último minuto del encuentro. A esta intervención, se unen dos más en las que el mencionado Toño sacó dos mano a mano a sendos jugadores ché.
El partido no pareció de Agosto. Se vio intensidad, buenos minutos por parte de ambos equipos, llegadas y oportunidades claras. El peso lo quiso llevar el Valencia, pero el Rayo impuso por momentos su sistema de juego en el mediocampo, donde todos los balones pasaban como siempre por los pies del gallego Trashorras. Aún así, intentaremos analizar situaciones a mejorar de cara a las próximas jornadas.
La línea defensiva no cometió errores en la salida de balón. Losa estos años en los equipos de Jémez. Un nombre destacó por encima del resto, el recién llegado Llorente, que con su corta edad consiguió secar a todo un Álvaro Negredo. Los detalles por pulir son pocos pero importantes. Algún fallo en la marca de los laterales, donde Piatti gano alguna vez la espalda con peligro, y la falta de profundidad en ataque de Tito, que llegó mermado por una lesión fueron la nota a mejorar.
Manucho muy errático en el partido (as)
  Trashorras cumplió, aunque por momentos desapareció. Baena estuvo omnipresente, pero se desgastó pronto en el encuentro. Llegó justo de fuerzas y en alguna ocasión se le vio superado por el centro del campo valencianista.
En la línea de tres cuartos, Bebé comenzó con mucho ahínco, pero demasiado individualista, intentando disparo tras disparo sin acierto ni peligro ninguno. Tendrá el portugués que entenderse con sus compañeros, ya que si no su ataque parece muy previsible. Ni que decir tiene que Miku no es Alberto Bueno. Se echa en falta el trabajo en la media punta del madrileño, que enlazaba con extremos y la punta.
Y como apunte final, el Rayo Vallecano debería intentar la contratación de un delantero centro, ya que aunque el trabajo de Manucho es intachable, la sucesión de errores ante el meta rival desquicia a compañeros y afición.
En resumen, aunque fue un gran punto el conseguido ante uno de los gallitos de la categoría, hay que pulir esos detalles paria ser el equipo que durante estos años no ha pasado problemas para mantener la categoría. Hay tiempo y ganas para conseguirlo, y el trabajo es la clave.