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Vietto disputando un partido con el Atleti ante el Sevilla. (FOTO: marca.com) |
Todos los años por estas fechas asistimos a los llamados “culebrones
del verano”, que suelen ser aquellos jugadores que llenan portadas y están en
boca de todos los periodistas porque pueden cambiar de equipo. En este mercado veraniego
hay unos cuantos, pero uno de ellos es el de Luciano Vietto. El argentino
llegaba el año pasado al Atlético de Madrid con la etiqueta de “un joven
jugador de futuro” y que en el Villarreal había completado una gran temporada.
Pero, su temporada en el club rojiblanco no ha convencido a los técnicos y eso
ha propiciado su salida al Sevilla en calidad de cedido.
A lo de “en calidad de cedido” quería yo llegar. Resulta que
en el Atlético se confía en que el jugador vuelva a ganar confianza jugando al
fútbol –valga la redundancia-, se sienta importante en una plantilla, crezca
como jugador y luego pueda volver para asentarse de manera definitiva como uno
de los delanteros más importantes del equipo. Para ello, Sevilla y Atleti han
llegado a un acuerdo para que Vietto se marche cedido al club hispalense, a
cambio de 3 millones de euros más una opción de compra, por parte del Sevilla,
de 20 millones de euros, si el jugador cumple con las expectativas en Nervión. Eso
sí, según varias fuentes, el club colchonero se habría guardardo una posterior opción
de recompra por 3 millones de euros.
Ahora bien, pongámonos que esa opción de recompra no existiera.
¿Sería un buen negocio para el Atleti ceder a Vietto al Sevilla con una opción
de compra? Es decir, si el jugador despuntase en el Sánchez Pizjuán, el Sevilla
pagaría 20 millones de euros y se lo quedaría. Pero, si no cumpliese con las
expectativas, te devuelve a un jugador que llevaría dos años sin destacar,
procedente de un equipo donde, a priori, tendría que haber tenido más
protagonismo. Volvería así, al Atleti con el “caché” mucho más bajo y
posiblemente sin ninguna opción de tener un hueco en los planes de Simeone.
En resumen, los rojiblancos le ceden para que gane minutos
pero refuerzan a un rival y si destaca lo vendes por 20 milones de euros y si no, te lo quedas
para malvenderlo. Es decir, pocas posibilidades tiene el argentino de volver a
vestir la rojiblanca. Lo haga bien o lo haga mal. Pienso que es complicada la
situación pero tras estos párrafos quiero expresar mi desacuerdo con esa práctica
de la “opción de compra”. Veremos como acaba este culebrón y sino, por lo
menos, siempre nos quedará esa “opción de recompra”.