La Premier League comenzó este fin de semana una de sus ediciones mas interesantes de los últimos años, y no pudo hacerlo de mejor manera. El sábado Liverpool y Stoke City inauguraron la competición y en donde los reds mostraron su mejor fútbol en mucho tiempo. Sin embargo el Liverpool no sentenció y el Stoke tuvo la oportunidad de sacar un punto de Anfield cuando Agger cometió un estúpido penalti por mano en los últimos minutos. Pero por desgracia para el Stoke, Walters falló el penalti y el Liverpool consiguió comenzar con buen pie la temporada. 
Tras un decepcionante verano en donde el Arsenal no ha logrado ningún fichaje de renombre, los gunners no han podido empezar peor tras caer en su propio estadio ante un equipo de mitad baja de la tabla como el Aston Villa. Los dos goles de Benteke y el tanto del español Luna, sirvieron al Villa para remontar el tempranero tanto de Giroud. La sensación de fracaso fue tal que el propio Wenger tuvo que pedir disculpas. 
Roberto Martínez comenzó el reto mas grande de su carrera en el campo del siempre atractivo Norwich City sin apenas modificar el esquema de David Moyes. Ambos equipos mostraron un fútbol alegre y donde parecía que el Everton se iba a llevar el triunfo tras remontar el 1-0. Pero finalmente el fichaje estrella del Norwich, Van Wolfswinkel, consiguió el empate en los instantes finales con un gran tanto de cabeza. 
En los partidos de lo que se prevé la zona media de la tabla, Fulham y Southampton lograron un importante triunfo por 0-1 ante Sunderland y WBA respectivamente. El que no tuvo tan buen debut a domicilio fue el Cardiff City, debutante en la Premier. El West Ham no tuvo piedad de los recién llegados y los despacharon con un 2-0. Temporada muy difícil la que van a tener los galeses en la Premier. 
Hablando de galeses, el Swansea recibía en un choque histórico a un Manchester United sin Alex Ferguson. El juego del United dejó mucho que desear y solo el enorme Robin Van Persie impidió que el debut de Moyes fuera un desastre. A pesar del abultado triunfo, los diablos rojos no parecen tener lo suficiente para competir con City y Chelsea, por lo que tendrán que fichar algo en lo que queda de mercado. 
El domingo los otros recién ascendidos siguieron la mala estela que había iniciado el Cardiff el día antes. El Crystal Palace cayó ante el Tottenham en un aburridísimo derbi y que solo se decidió por un penalti que Soldado anotó a la perfección. Una imagen muy distinta fue la que dio el Chelsea. Con Stramford Bridge rendido a Mourinho, el Chelsea pasó por encima del Hull City en una primera media hora de escándalo. Tras una segunda parte de un ritmo mucho mas bajo, Mou y el Chelsea se preparan para los primeros grandes partidos de la temporada ante United y Bayern. 

Pero el que mejor impresión dio fue el City de Pellegrini. El Newcastle no tuvo opción y a la media hora podía dar gracias por solo ir perdiendo 2-0. En la segunda parte el City levantó el pie del acelerador, pero ante un rival con diez jugadores y con un juego tan pobre, el City acabó ganando 4-0 colocándose así líder.