Si se busca un equipo que haya tenido mala suerte con las lesiones en la defensa, el Málaga se lleva la palma. El equipo de la Costa del Sol no ha conseguido mantener una defensa fija lo que llevamos de temporada, ya sea por sanciones, lesiones o mal rendimiento. A pesar de haber tenido esa mala suerte atrás y no poder contar con unos jugadores fijos, el equipo no es de los más goleados de la competición.

Este verano se reforzó la parcela defensiva con la llegada del argentino Angeleri, un auténtico comodín ya que puede adaptarse a cualquier posición pero su sitio natural y dónde se siente más cómodo es en el lateral derecho. También llegó como una joven promesa procedente de Portugal; Flávio Ferreira. El jugador empezó la temporada lesionado y, para cuando estaba recuperado, no conseguía entrar en los planes de Schuster. Hasta el pasado 14 de enero ante el Levante, no conseguía debutar. De momento, no ha salido del 11 titular gracias a sus buenas actuaciones.

El lateral zurdo Casado llegaría para reforzar esa posición en el conjunto malaguista, dado que sólo tiene al portugués Antunes. Hasta la fecha sólo ha disputado 1 partido y lo hizo en el lateral derecho. Llegó tras una larga lesión y ya está totalmente recuperado.

Weligton, ese es el nombre del jefe de la defensa blanquiazul. El ‘Mariscal’ no ha tenido tampoco suerte con las lesiones ésta temporada, pero siempre que está bien juega. Es un central expeditivo y que aporta mucha seguridad atrás. Su salida de balón es limpia y es rápido al cruce. Lleva 7 temporadas en el club, es uno de los capitanes y voz autorizada del vestuario.

Otro veterano de la plantilla, el que más, es Jesús Gámez. Indiscutible para todos los entrenadores que han pasado por el banquillo de la Costa del Sol. El de Fuengirola es el ejemplo de que ser profeta en su tierra no es una utopía. Está considerado uno de los mejores laterales diestros de la Liga BBVA, defiende y ataca con mucha solvencia. Ha coqueteado alguna vez con la posibilidad de poder ser convocado por la selección española.

Sin embargo, en el equipo también hay señalados como el catalán Sergio Sánchez. El jugador llegó hace 3 temporadas procedente del Sevilla, tras superar sus problemas de corazón que a punto estuvieron de retirarle del deporte. En sus 2 primeras temporadas no gozó de muchas oportunidades, ya que Pellegrini le fichó para el lateral diestro y poder darle descanso a Jesús Gámez. Pero el de Mataró siempre se ha sentido más cómo en el centro de la zaga. Este año, con Schuster en el banquillo, Sergio está jugando donde se siente más cómo pero eso no le ha impedido que siga siendo uno de los señalados de la afición de La Rosaleda.

Y llegamos al que sí está asentado y ha jugado todos los partidos excepto uno, Vitorino Antunes. Llegó el pasado mercado invernal cedido, con opción de compra, procedente del Paços de Ferreira. Su adaptación al equipo blanquiazul fue buenísima y rápidamente se unió a la buena dinámica del EuroMálaga. Tal fue la satisfacción que produjo a los máximos dirigentes malaguistas, que aún sin haber un entrenador contratado, se efectuó su opción de compra. Lateral rápido que le gusta sumarse al ataque y que posee un fortísimo disparo desde lejos. Es internacional con la selección portuguesa.

También llegó este verano el panameño Roberto Chen, todo un desconocido para la afición. Disputó 2 partidos y no volvió a entrar en los planes de Schuster. Sin embargo, se le tienen muchas esperanzas y ha sido cedido al Zulte Waregem belga para que no se vea estancada su progresión. Lo poco que se la ha podido ver, no ha desentonado. Es rápido, da muy buena salida al balón pero tiene que adaptarse al fútbol europeo. Es internacional con Panamá a pesar de su juventud.

Siete defensas y ninguno ha podido disputar todos los partidos. La maldición en el cerrojo esta temporada en el Málaga es evidente.