Su fichaje no hizo mucho ruido. Sin embargo, Adriano es un jugador muy rentable para el Barcelona. El brasileño ha jugado en varias demarcaciones, lateral o central cuando fue necesario. En este momento de especial necesidad, probablemente, acompañará a Mascherano en el eje de la zaga. El excelente extremo del Sevilla es una pieza de recambio en el Barcelona.

Adriano Correia nació hace 29 años en Brasil. Debutó en el Coritiba en 2002, equipo de su ciudad natal. En el mercado invernal de 2005 llega al Sevilla FC. Monchi se fija en las grandes cualidades de Adriano y juega más de 200 partidos en la disciplina sevillista. Marcó 19 goles y demostró su polivalencia para jugar de lateral o de extremo.

En 2010, Adriano llega a la disciplina culé. Es un jugador polivalente en la plantilla, sus goles han dado valiosos puntos. Sus dos grandes cualidades son la velocidad y su facilidad para hacer gol en sus internadas por la banda. Se adapta a la perfección al estilo Barcelona y es un recambio de garantías para Jordi Alba. En algunos casos, también ha sido central de urgencia. Su rendimiento ha sido bueno, independientemente de la posición que ocupe en el campo.

Este Jugador 11 y Medio tiene una gran clase. Un lateral de largo recorrido y con la innata magia brasileña. En otras palabras, jugadores que aportan un valor añadida para una plantilla de estrellas. Sin duda, una inversión de 13,5 millones de euros bastante acertada. Además, posee una buena capacidad para asociarse con los delanteros. No es un jugador individualista, tiene gran sentido del juego colectivo.

Su único lunar es su participación en la selección brasileña. Ha jugado 9 partidos internacionales y no ha anotado ningún gol. La competencia en el lateral (Marcelo y Felipe Luis) le ha quitado la posibilidad de brillar con la canarinha. De todas formas, es un jugador de clase excepcional y se merece un justo reconocimiento.