Bienvenidos a un Mundial inédito para amantes y entendidos del fútbol, un Mundial en el que hemos presenciado como el continente europeo ha naufragado ante el potencial y el ímpetu por defender la condición de “anfitriones” de los combinados nacionales representantes del continente americano. Simplemente hemos de citar el hecho de que 8 de los 10 integrantes procedentes de la CONMEBOL y CONCACAF tomarán lugar en los octavos de final.
Y es que uno ha de hablar de fracaso respecto al continente europeo, ya que no sólo la eliminación clara del combinado español -vigente campeón mundial- en la fase de grupos y a falta de un partido para finalizarla ha sido el único argumento. El resto de selecciones europeas, a excepción de una joven y rejuvenecida Francia,  de una constante y como siempre rocosa selección germana, una imponente nación holandesa encabezada por la tripleta RVS (Robben-Van Persie- Sneijder), y un resultadista combinado belga, han acompañado negativamente.
Si qué es cierto que el caso más sonado ha sido el de España, defensora de la estrella mundialista conseguida en 2010 en Sudáfrica, ha visto como la estrepitosa derrota por 1-5 frente a Holanda, y la posterior derrota por 2-0 ante una combativa selección chilena le dejaban sin opciones -dejando la victoria ante Australia en simple anécdota y obligando a pensar ya en una profunda renovación en el seno de “la roja”. Otro caso, aunque quizás menos sonado ha sido el de Croacia, que fundamentada en los centrocampistas Rakitic y Modric, y en el punta Mandzukic, se ha llevado únicamente de Brasil el recuerdo de un 0-4 ante una nefasta Camerún. Pero es sin duda el desastre europeo en el Grupo D el que más llama la atención de seguidores y analistas, dos equipos a priori con menor potencial -más aún la selección costarricense- como COSTA RICA y Uruguay se han colado en los octavos y por méritos propios. La selección costarricense, de la cuál hablaremos posteriormente ha sorprendido al mundo entero al colarse como primera del “grupo de la muerte”, apeando así tras la revolución “Suárez” uruguaya, a  dos grandes equipos europeos como son Italia e Inglaterra. La eliminación de la primera de ellas es la que más sorprende, ya que tras un buen inicio -dejando buenas sensaciones- con la victoria ante la inglesa, ha visto como las sendas derrotas por 0-1 ante los dos equipos americanos la han apeado de un torneo en el que jugadores como Pirlo, Buffon o el propio César Prandelli  tenían como últimas citas internacionales en sus respectivas carreras. El caso de la selección inglesa no nos sorprende, ya que llevan ya más de una década sin encontrar su sitio a nivel mundial, y sin demostrar esa calidad que por nombres y jugadores atesora, no logrando alcanzarla ni con pequeñas renovaciones de jugadores -Sterling, Baines, Lallana o Lambert-.
Y es que a pesar de las estadísticas digan que el 46,15% alcanzarán la siguiente ronda, no podemos olvidar que las selecciones de Suiza y de Grecia -ésta última de penalti en el último minuto de partido ante Costa de Marfil- han conseguido el pase in-extremis a la siguiente ronda. El caso griego es el más relevante, caracterizado por la mediocridad y la estaticidad de juego durante la fase de grupos, un empate ante Japón, y un buen partido ante el combinado africano le han dado el derecho a jugar los octavos. Por último, citar que de Portugal poco que decir, ya que no ha rendido ni mucho menos a la altura que se esperaba de la selección liderada por Cristiano, y que como buenos “hermanos ibéricos” acompañará en el viaje de vuelta a las primeras de cambio a la selección española. Desastre ibérico.
Por contraposición nos encontramos ante un continente americano que ha ajusticiado la soberanía europea que hemos vivido en los últimos mundiales. Con un balance de 18 partidos ganados de los 44 partidos disputados hasta la fecha -40,91% de bagaje victorioso, con un 43,81% de los puntos totales reunidos, y con una cifra goleadora del 35,6% de los goles recogidos, queda demostrado que éste Mundial, sea por aclimatación, por ímpetu y ganas, o simplemente cosa de la diosa fortuna, está siendo más americano que nunca. Y es que de no ser por la eliminación de Ecuador en la noche del 25, la cifra de clasificados habría ascendido a 9 de los 10 participantes, quedando descolgada únicamente la selección hondureña – la cuál ha dejado patente que el fútbol no es sólo ganas-.
Y es que en el grupo A, hemos visto como dos equipos americanos -la anfitriona Brasil, y México- han pugnado por la primera plaza del grupo, dejando en simples espectadoras a las selecciones de Croacia y Camerún -ésta queda suspendida por incomparecencia-. A destacar Neymar -4 goles en 3 partidos- por parte canarinha, y prácticamente el bloque entero mexicano, el cuál llegó con muchas dudas sobre su rendimiento antes del Mundial, pero que ha rendido como lleva haciendo en las últimas citas mundialísticas. En el grupo B, la selección chilena -como al menos aquí el que escribe tenía claro desde un principio-, ha logrado el pase sobreponiéndose a una luchadora y rodada Australia-recordemos que llegaron 10 días antes del comienzo del Mundial con el fin de aclimatarse-, y sobretodo dejando sin rumbo a la actual campeona del Mundial, garantizándose así un lugar en octavos.
Lo de la selección colombiana en el grupo C no ha sorprendido a ningún entendido del fútbol, logrando los 9 puntos con autoridad- 9 goles a favor por 2 en contra-, los cafeteros bajo el mando principalmente de Cuadrado y de James Rodríguez se han comido literalmente a leones, nipones y helenos, tomándose incluso el placer de darle minutos al cancerbero Mondragón, que con 43 años se ha convertido en el jugador en activo con mayor edad en disputar un mundial.

Por su parte el Grupo D ha sido testigo directo de la ambición de los equipos americanos, ya que como antes cité, Costa Rica y Uruguay han avanzado a la siguiente ronda apeando a dos campeonas mundiales como Italia e Inglaterra. El caso de Costa Rica ha sido sin duda el que mayor revuelo ha alcanzado, ya que se ha impuesto al hecho de no disponer ante tales selecciones por jugadores a priori “sin demasiado renombre” a nivel mundial, siendo liderada por jugadores como el cancerbero Keylor Navas, los extremos Joel Campbell y Bryan Ruiz, y el centrocampista Celso Borges. Y lo ha hecho sin dejar derrota alguna por el camino, y viéndose encajar un único gol en los 3 partidos disputados. El propio Borges ya ha afirmado que “la tricolor va a por más” durante estas fases finales. El caso de Uruguay no es menos sonado, gracias a la ya conocida “Revolución Suárez”, una selección que no auguraba nada bueno al comenzar con derrota ante la tricolor, gracias digamos que a la vuelta del punta recuperó esa identidad que le llevó a estar presente en las semifinales del  Mundial de 2010. Cabe citar que el charrúa Godín sigue sin perder esa presencia con goles claves que le ha caracterizado este año -ante el Barcelona en el último partido de liga, y ante el Real Madrid en la final de Champions-. Veremos como reacciona el combinado uruguayo a la pérdida de su revolucionario Suárez tras haberse confirmado la sanción por el grave incidente con el azzurro Giorgio Chiellini de 9 partidos y 4 meses fuera de cualquier estadio.
El grupo E ha sido la principal desilusión de la afición americana ya que a una nefasta Honduras, la cuál no ha sabido estar a la altura en este mundial, se unió finalmente la eliminación de una selección ecuatoriana que vio como Suiza le arrebataba la segunda posición del grupo.
Por su parte la selección argentina, a pesar de no brindar un juego autoritario y dominante que por jugadores de corte ofensivo cabría atesorar, y ante rivales de mucho menor nivel- Nigeria, Bosnia e Irán-, no ha encontrado contrincante a un Leo Messi -con 4 goles claves comparte primer puesto para la bota de oro junto a Neymar y Angel Di María -éste último en estado de gracia- que han decidido prácticamente sólos los partidos, alcanzando la siguiente ronda con pleno de victorias. Veremos si el poco rodaje ante equipos de mayor nivel no le pasa factura a la albiceleste en rondas futuras.
Por último la selección estadounidense ha hecho valer la victoria ante la selección ghanesa, y el coraje demostrado remontando para finalmente empatar ante la selección portuguesa para lograr un puesto en los octavos. Finalmente la mentalización que ha impregnado el técnico Jürgen Klinsmann a sus jugadores ha surtido efecto, y los yankees tendrán representación en la siguiente ronda.
Esta potestad americana no ha pasado despercibida para jugadores y analistas, ya que cada cuál tiene su punto de vista. Andrea Pirlo ya afirmó tras los dos primeros partidos en primer lugar que “hay dos mundiales: uno en el caluroso norte, y otro en el más fresco sur del país. En segundo lugar declaró que “estos factores son definitivamente importantes, en especial cuando uno viene a estos países con mucho calor y humedad y con jugadores más acostumbrados a este tipo de condiciones». Expertos comentaristas americanos ya señalaron que dichos factores influían acentuadamente, pero que ciertas selecciones europeas no habían tenido problema alguno para aclimatarse a dichas condiciones, evitando así que justifiquen las derrotas cosechadas.
Siendo, o no siendo motivo de excusas, el hecho de que éste mundial es más americano que nunca, a la par que menos europeo que en décadas, es patente. Veremos pues de la misma forma como finaliza, como la celeste se desenvuelve ante equipos rodados, como la Canarinha media la presión a la que todo el país le somete, como defienden trono los equipos del continente europeo, y cómo equipos como Colombia, Costa Rica, México o Bélgica aprovechan éste campeonato para dar un golpe sobre la mesa, y colarse en la élite del fútbol mundial.

Fdo: @ChrisKDLopez