Tras los desgraciados episodios de violencia vividos el domingo pasado en la zona de Madrid Río (zona cercana al estadio Vicente Calderón), en el que un hincha de los ‘Riazor Blues’ (grupo ultra del Deportivo de la Coruña con ideología de extrema izquierda) muriera a manos de hinchas del Frente Atlético (grupo ultra del Atlético de Madrid con ideología de extrema derecha), se han abierto muchos interrogantes sobre este tema.

 

El hecho de que ambos grupos hicieran una quedada para pegarse, ya es sinónimo de qué algo no se está haciendo bien, o de que hay algo que ciertas personas no entienden, pero lo más importante es intentar atajar estos problemas desde la raíz y erradicarlos para siempre, dejando al únicamente fútbol como deportesin ningún tipo de violencia.

 

Como he señalado más arriba, son grupos con diferentes ideologías enfrentadas, y fue la política, sobre todo, lo que propició la barbarie que ocurrió, pero ¿hay otros factores que directa o indirectamente han tenido que ver? Creo que la respuesta es sí. Ser aficionados de equipos rivales, la presión a la que desde muy pequeños se ven afectados algunos futbolistas….Otro de esos factores podría ser la propia prensa deportiva, aunque, evidentemente, de forma indirecta.

 

En España hay prensa deportiva que se identifica con uno o varios clubes, y normalmente ocupan sus informaciones con noticias de esos equipos, dándoles, en muchas ocasiones, más repercusión que a otros equipos, lo que despierta recelos en los aficionados de los equipos perjudicados. La mayoría de las veces, estos aficionados se ven incapaces de conocer la actualidad de su equipo, ya que simplemente no aparece por ningún lado o en recovecos difíciles de encontrar y provoca sentimientos negativos hacia equipos que sí tienen informaciones diarias.

 

En otras ocasiones, dan un mayor trato de favor a ciertos equipos, denunciando campañas de agravios comparativos con otros clubes (tengan o no razón) o iniciando candidaturas, ya sea a nivel de clubes o jugadores, que conlleva a menospreciar a tantos otros. Como ya he comentado en el apartado anterior, esto provoca que los aficionados, a veces, lo lleven al terreno personal, volcando su enfado o impotencia en jugadores, clubes o aficiones rivales.

 

Otro tema a tratar es las palabras que algunas veces se utilizan para destacar la supremacía de un equipo sobre otro, tales como “Qué tiemble….”, “… amenaza a …”, “… bocazas”, “Comienza la batalla”, etcétera. Palabras que en la vida normal podrían generar violencia, y que en la prensa se utilizan de manera constante.

Comparativa de portadas de los diarios Super Deporte, Sport y As

 

La prensa es generadora de opinión, y la mayoría de los temas que se traten en periódicos, tertulias, programas… se tratarán también entre amigos, compañeros de trabajo y entre aficiones, bien sean amigas o enemigas, lo que provocará ciertas discusiones. Y las discusiones, amigables, siempre vienen bien, se conocen otros puntos de vista y te pueden sacar del error en el que estabas inmerso.

 

Pero también es cierto que la violencia va en la naturaleza de cada uno, y sólo ese tipo de personas entenderán los mensajes que envía la prensa como armas arrojadizas para engendrar y generar más violencia.

 

 

Desde aquí envío un mensaje bien claro, ¡No a la violencia en el deporte!