Al final poco se comentó del juego violento en el Atlético Real Madrid. La paliza histórica no fue producto de la casualidad y a continuación, explicaremos las causas de semejante varapalo. Simeone acertó en su planteamiento y una vez más encontró el camino para minimizar al Real Madrid. Sin embargo, Ancelotti demostró su incapacidad para cambiar el plan A. Sería cómodo hablar de las bajas que eran notables (Ramos, James, Marcelo, Pepe…) aunque es necesario hacer un análisis más profundo. En fútbol hay pocas casualidades y las causalidades explican en gran parte los resultados.
Simeone construyó su once pensando en los puntos débiles de su contrincante. Mandzukic era el delantero perfecto para explotar la falta de experiencia de Nacho y la fragilidad en la contudencia de Varane. Además, con un centrocampista más, despojaría de posesión al Real Madrid y le obligaría a correr más sin balón. Este plan machacaría el agotamiento evidente de Kroos e Isco y a medio-largo plazo desconectaría al Real Madrid. El largo recorrido de Juanfran y Siqueira no sería acompañado por Bale ni Cristiano, la superioridad por las bandas en ataque sería inevitable. Para acabar con su plan perfecto, cortó la línea de pase a Kroos con un trabajo descomunal de Gabi y Tiago.
Por otro lado, Ancelotti no supo encontrar la alternativa a una situación complicada. Su obsesión por no rotar a jugadores en partidos sentenciados o ante rivales menores ha provocado una situación límite en muchos jugadores. Kroos está con la batería en reserva y en el último mes ha dado un bajón importante. A Carletto le da igual, Isco y Kroos están al borde de romperse y no hace nada por evitarlo. Insiste en darle más oportunidades a dos jugadores desconectados del proyecto (Coentrao y Khedira). Consciente de la intensidad e impetú en la zona ancha del Atlético, no refuerza esa demarcación, jugando con un futbolista menos en la media. Los tres de ataque no participan en el juego defensivo y Benzema también presenta claros síntomas de agotamiento.
Después del fracaso del Calderón, Carletto sale muy bien parado gracias a la prensa. Se quejó de la actitud de sus jugadores, pero no hizo autocrítica sobre su mal planteamiento táctico. Los problemas del Madrid están a la vista para quien los quiera ver. La diferencia del marcador es parecida a la distancia que existe entre Simeone y Ancelotti a nivel táctico. Seguramente algunos me calificaran como «mourinhista», pero la gestión de la plantilla y los planteamientos tácticos no son propios de un entrenador del Real Madrid