El Madrid se deshace. La historia siempre guarda una versión aún más trágica para la mayor de las desgracias. Al contrario que el año pasado, donde en una semana de clásico y visita a Sevilla se fue al garete una Liga que luego, erróneamente, se dejó a la deriva ante el pase de rondas en Europa, la película esta temporada muestra un Madrid equilibrado y deslumbrante en Noviembre. Compacto. Pero como un azucarillo. De más al menos más horrible. Al que las lesiones y la quema de sus figuras han llevado a la situación extrema de ver como el Barcelona les puede arrebatar el liderato con la visita a la Ciudad Condal caliente en el calendario. Ancelotti se reivindicaba en la previa, pero su gestión de vestuario hace aguas y el Madrid se derritió en la ría de Bilbao. Ni la vuelta de Modric el martes ni el depender de sí mismos consuelan hoy al madridismo.
El encuentro se presentaba guerrero, no es para menos, uno de los grandes clásicos de la Liga llegaba con el Athletic supuestamente cansado tras su remontada copera del miércoles. Tras cinco minutos de partido nos daríamos cuenta de que, como siempre, el blanco rival da alas. El Madrid tampoco se achicaba, pero las ocasiones no llegaban para ningún conjunto. En el 27′, un centro magnífico de Mikel Rico, imperial todo el partido, ponía a Aduriz ante su especialidad, no la de marcar al Madrid ya que nunca lo había hecho en Liga, pero sí la de lucir cabezazo ante Pepe y poner por delante a los rojiblancos. Imposible para Iker.
Tras el tanto el Madrid entró en barrena, con Kroos en versión figura «Mattel», Illarra en Basauri y la BBC sin hacer la revisión de antenas de la comunidad de vecinos, en pantalla gris. Marcelo espoleaba al Madrid y Varane los mantenía en el encuentro, pero una magnífica jugada del primero quedó en nada antes del descanso.
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| Impotente el Madrid (Fuente Imagen: www.as.com) |
No sabemos si mano dura, blanda u orgullo, pero el Madrid salió de vestuarios con el chip cambiado. Cristiano e Isco lo intentaban, mientras que Benzema ya tenía asumido que no era su día, pero el balón no entraba ni las ocasiones eran del todo claras. El pequeño Iñaki Williams se convertía en hombre por las bandas de La Catedral, con un despliegue físico que le dejó con la lengua fuera, méritos que San Mamés premió con una generosa ovación tras su sustitución. Futuro y preocupación para Susaeta.
Con Jesé dentro, de nuevo difuso y desconocido, y los típicos diez minutos de Chicharito desde que las cosas se han puesto feas, el Real casi encuentra el empate de la forma más inverosímil, con un chut, o algo así, de Bale desde el centro del campo que se fue al palo derecho de Iraizoz. Pero ni por esas, no era el día. Con un disparo de Lucas Silva a la ría finalizaría el encuentro. La pelota está ahora en el tejado del Barcelona, con el Madrid dependiendo aún de sí mismo, pero teniendo que elegir la peor plaza para encontrarse: el Camp Nou.
FICHA DEL PARTIDO
(1) ATHLETIC CLUB: Iraizoz; Iraola, Gurpegi, Etxeita, Balenziaga; Mikel Rico (Toquero 91′), Beñat, De Marcos, Muniain (Susaeta 64′); Williams (Guillermo 74′), Aduriz
(0) REAL MADRID: Casillas; Carvajal, Varane, Pepe, Marcelo; Illarra (Jesé 71′), Kroos (Lucas Silva 76′), Isco; Bale, Cristiano Ronaldo, Benzema (Chicharito 80′)
GOLES
Aduriz 27′
