Hace cerca de un mes, yo mismo repasaba cuales habían sido los mejores centrocampistas de la historia de la Champions en este mismo blog. En ese texto mencionaba como algunos de los mejores jugadores de la historia y de los últimos años, se quedaban fuera de la lista. ¿Por qué? Porque a pesar de ser leyendas, ídolos a nivel mundial, y ganar infinidad de títulos y trofeos, nunca ganaron la máxima competición a nivel de clubes del mundo. Nosotros no queremos olvidarnos de estos, porque en el fútbol no todo se basa en ganar o perder y lo que estos hombres hicieron por este maravilloso deporte, encandilándonos a todo nosotros, vale mas que cualquier título. En el día recordaremos a todos esos grandes jugadores que participaron en esta competición, y que (unos mas cerca que otros) no pudieron añadirla a sus vitrinas. 

Pavel Nedved. Uno de los mejores jugadores checos de la historia, por no decir el mejor directamente. En 2003 Nedved tuvo la oportunidad de alzar la orejona, cuando un gol suyo ante el Real Madrid en semifinales clasificó a la Juventus a la gran final de Old Trafford. Sin embargo el destino fue doblemente cruel con él. Nedved no solo no pudo jugar esa final por acumulación de tarjetas, sino que el Milan venció a la Juventus en la tanda de penaltis, logrando así su sexta Copa de Europa. Igualmente, el mundo del fútbol reconoció el trabajo de Nedved, y esa misma temporada fue galardonado con el Balón de Oro. 
Francesco Totti. La posibilidad de ver al, probablemente, jugador mas importante de la Roma levantar la Champions algún día todavía existe, pero seamos sinceros es mas bien improbable. Totti ya no está a su mejor nivel y no sería de extrañar que la del año que viene fuera su última temporada. Sin embargo, que su palmarés tenga o no una Champions o no es irrelevante. Su amor hacia su club, su calidad y su trabajo, causaran admiración incluso a las generaciones venideras. Además, el Scudetto que logró en 2001 con la Roma, valdrá para él y los aficionados romanistas, tanto o mas que una Champions. 
Lothar Matthäus. Campeón del mundo con Alemania en el 90 y Balón de Oro ese mismo año, esta leyenda del fútbol alemán y del Inter lo ganó todo (incluso la Copa de la UEFA en dos ocasiones), pero por desgracia la Champions se le escapó, y en su caso, en tan solo un minuto, ya que Matthäus fue testigo directo de la final que se disputó en el Camp Nou en 1999. Siendo ya un jugador veterano (sería su penúltima temporada en la élite antes de irse a Estados Unidos) Matthäus tuvo una última oportunidad de hacerse con el oro saliendo en el once titular de la final que el Bayern disputaría con el Manchester United. El triunfo alemán parecía cuestión de pocos minutos cuando el cuarto árbitro sacó la tablilla con el descuento, y el Bayern ganaba por 1-0. En un espectacular giro de los acontecimientos, el United remontaría el partido antes de que el partido acabase en dos saques de esquina, dejando al Bayern sin la Copa de Europa hasta dos años después, en donde Matthäus ya no formaba parte del equipo. 
Maradona. Probablemente el mayor jugador sin una Copa de Europa en su palmarés. Realmente Maradona no tuvo demasiadas oportunidades de ganarla. En el Barcelona solo jugó dos temporadas y en ninguna de

ellas disputó Champions, mientras que en el Napoli tan solo jugó una vez en la Copa de Europa tras ganar los legendarios Scudettos del 87 y el 90, siendo lo mas recordado su participación en un Real Madrid-Napoli a puerta cerrada. Maradona lograría con el Napoli la Copa de la UEFA a nivel internacional, pero realmente sabe a poco que una leyenda de su calibre no tuviera mayor recorrido por el torneo. 

La Quinta del Buitre. Por lo general todos los equipos que marcaron una época en sus respectivos países, también acabaron consolidando su poderío en Europa. El Madrid de la Quinta del Buitre lograría ganar un total de cinco Ligas consecutivas, pero la Copa de Europa fue la horma de su zapato. Esta generación de futbolistas compuesta por jugadores de la talla de Hugo Sánchez, Butragueño o Michel tuvo la suerte de cruzarse por el camino con otro equipo de leyenda, el Milan de Sacchi. Dos veces fue las veces que el Milan dejó al Madrid a las puertas de la final en esa época (incluyendo un humillante 5-0). Pero la temporada que mas debió doler a los madridistas fue en la que fueron eliminados por el PSV en una eliminatoria donde ellos eran los principales favoritos. El Madrid no conseguiría romper el gafe europeo del Madrid de esos años, pero al menos Sanchís pudo vivir la emoción de levantar el mismo la copa en 1998. 
Kubala. Aunque el Barcelona de la década de los 50 ha quedado a la sombra del Madrid de Di Stéfano y las cinco Copas de Europa, por el conjunto culé pasaron jugadores de tremenda calidad por esos años. Kocsis, Czibor, Luis Suárez,…Y en especial, Kubala. El que fue elegido en 1999 mejor jugador de la historia del Barcelona, participó en la Copa de Europa en dos ocasiones firmando un gran papel en ellas. En la primera, cayó frente al Madrid en las semifinales, mientras que en la segunda, tras vengarse del Madrid y convertirse en el primer equipo en eliminar al club merengue en una eliminatoria europea, el Barcelona sucumbió ante el Benfica. Kubala dejaría el club ese mismo año, por lo que esta fue su última oportunidad de consagrarse con el título de títulos. 

Ronaldo. El que fuera uno de los mejores delanteros de los 90 y del comienzo de este siglo, no ha tenido la ocasión de disputar una final de Champions y ni mucho menos ganarla. Con el equipo que mas cerca estuvo de lograrlo fue con el Real Madrid en 2003, cuando el Madrid se enfrentó a la Juventus en las semifinales después de una exhibición de Ronaldo en Manchester en cuartos. Un penalti fallido de Figo, dejó al Madrid sin opciones de pasar de ronda, y al ese momento Balón de Oro, sin la ansiada orejona. Después de esto, Ronaldo empezó a caer en declive junto al Madrid de los Galácticos, por lo que los fans del brasileño tendrán que quedarse con el recuerdo del Mundial 2002 para poder ver a su ídolo levantar un gran título. 

Van Nistelrooy. El caso de Vas Nistelrooy es también bastante destacable, ya que a pesar de no ser una leyenda tan grande como el resto de jugadores mencionados, el holandés es el cuarto máximo goleador de la historia del torneo, y que durante sus años en activo estuvo luchando mano a mano por el primer puesto de ese ranking. Sin embargo, su olfato goleador solo le sirvió para llegar hasta las semifinales en 2002 cuando un sorprendente Bayer Leverkusen dejó en la cuneta al United. Irónicamente, dos años después de su salida del United, los diablos rojos se harían con el título.