Nadie se esperaba que con 27 puntos al cierre de la primera vuelta, la SD Eibar fuese a estar a falta de dos jornadas y con 31 puntos, en puestos de descenso. Los eibarreses firmaron un inicio de temporada espectacular, llegando a ocupar la séptima plaza, pero los cuatro puntos obtenidos hasta ahora en lo que va de segunda vuelta han lastrado al equipo armero, que sin duda intentará sumar los puntos restantes para obtener la salvación.
El Eibar debutó en Primera División un 23 de agosto de 2014, sí, el año pasado, esta es la primera participación del conjunto armero en la máxima categoría, y la verdad es que empezó con buen pie. En el derbi guipuzcoano en Ipurúa ante la Real Sociedad, los locales se impusieron por 1 gol a cero, obra de Javi Lara, y sumando los tres puntos, con lo cual, el primer gol de la historia del equipo eibarrés en Primera División fue obra del extremo. Llegados a la jornada décima, el Eibar tenía 13 puntos, lo que le permitía ocupar la décima plaza, y al final de la primera vuelta, jornada 19-20, el Eibar había sumado ya los referidos 27 puntos. A partir de ahí, los de Gaizka Garitano sólo fueron capaces de sumar puntos en su visita al Nuevo Los Cármenes ante el  Granada (0-0) y en Ipurúa ante el Málaga (1-0), alcanzando la actual cifra de 31, lo que les otorga un puesto momentáneo de los del descenso. Es de salientar que ante los grandes de nuestra Liga, el equipo vasco sólo fue goleado en uno de los partidos, contra el Real Madrid (4-0).
Arruabarrena, máximo goleador del Eibar. Foto Marca

Nadie se explica qué puede haber pasado, si bien es cierto que la falta de capital económico no permitía realizar un gran desembolso en la busca de un jugador importante para reforzarse en invierno, esto parecía no hacer falta a raíz de los resultados que habían obtenido. Sin embargo la salida del defensa central, Raúl Albentosa al Derby County, de la Championship (2ª División de Inglaterra), dejó un hueco difícil de cubrir en la zaga armera. La llegada del centrocampista Borja Fernández procedente de la liga hindú no era lo que más  necesitaba el Eibar, que enseguida se vio envuelto en una espiral negativa de resultados. Ante ello, Garitano optó por cambiar a muchos jugadores de su once habitual, inclusive el guardameta Xabi Irureta dando entrada a Jaime, pero no obtuvo los beneficios esperados. Así, por ejemplo, Dídac Vilá, que no había participado apenas en la primera vuelta, en la segunda dispuso y dispone de partidos y minutos, caso igual es la situación de Txema Añibarro, que ha pasado de no contar a ser titular indiscutible, y en la situación inversa se encuentra Jon Errasti. Otras dificultades que se ha encontrado Garitano es el bajo rendimiento de algunos de los fichajes, así, jugadores como Lekic, Ángel Rodríguez, Boateng, o Dani Nieto, han aportado mucho menos de lo esperado por el club. Sin duda a quien no se les pueden achacar las culpas es a los goleadores Mikel Arruabarrena y Federico Piovaccari, este segundo se encuentra en calidad de cedido. El primero suma ocho dianas, y el jugador italiano cinco, 13 de los 30 goles a favor que lleva el Eibar. Muy de reseñar la temporada de Arruabarrena.

 Lo que había caracterizado a los armeros en la primera vuelta, desde mi humilde punto de vista, era su defensa férrea, encajando muy pocos goles, y en la segunda vuelta el muro se vino abajo, bien por la baja de Albentosa u otros factores ajenos a personas del exterior. El caso es que, a pesar de eso, de los equipos que ocupan los puestos undécimo a vigésimo, sólo la Real Sociedad lleva menos goles en contra que la SD. Eibar (54).

 

Supo sacar el máximo partido a sus goles a favor, ojalá lo sepa hacer en las dos jornadas que restan, visitan el Coliseum, y, en la última jornada, Ipurúa será un infierno para recibir al Córdoba. Y pase lo que pase, seis mil gargantas animarán a los jugadores del Eibar, porque para esta localidad de la provincia de Guipúzcoa, este ha sido un año de en sueño. Goazen!
Garitano, entrenador del Eibar. Foto Marca