Todas las victorias van acompañadas de derrotas. Unos son vencedores y otros vencidos. Ganar un partido o una competición siempre es motivo de satisfacción y alegría. Eso si, la celebración debe hacerse en su juta medida y ante todo respetando al rival. Esta semana la polémica ha llegado a la Liga BBVA con la particular celebración de algunos jugadores de la plantilla del FC Barcelona. Tras terminar el partido algunos jugadores como Neymar, Pique o Mascherano quisieron celebrar su particular fiesta Halloween en el Coliseum Alfonso Perez. Se disfrazaron con mascaras y revolotearon como si fueran unos niños por el estadio y alrededores. Hasta llegaron a colarse en la rueda de prensa de su compañero del Getafe Victor Rodríguez. Como cabía de esperar, todo este espectáculo no sentó nada de bien en el club getafense. Después de haber perdido el partido, la afición madrileña no estaba para fiestas de Halloween. El FC Barcelona no tardo en responder y pedir disculpas por todo lo ocurrido mediante un comunicado oficial.
 
      
     En el fútbol de élite todo se magnifica, el principal responsable la prensa, que suele hacer de un granito de arena toda un montaña. La celebración quizá se les fue algo de las manos, pero para nada se hizo con animo de ofender a nadie. En deportes como el fútbol se esta perdiendo la esencia, no deja de ser un juego. Un poco de simpatía y alegría no viene mal siempre y cuando no se falte el respeto a nadie.