El fútbol es bastante caprichoso y en ocasiones cruel con sus actores. Cheryschev se ha convertido en protagonista sin querer de una historia más propia de un film dirigido por Amenábar. Su alineación indebida ha llenado portadas, ha sido elegido como sintonía en Carranza para un buen tiempo y ha dado la vuelta al mundo. El objetivo de esta reflexión no es buscar culpables, que los hay y seguramente tienen más de un nombre. Sin embargo, el fútbol siempre da una oportunidad para olvidar gracias a los goles, por eso se antoja vital el partido frente al Getafe.
¿Será Cheryschev el mayor damnificado de la historia? De momento ha entrado en la convocatoria para jugar frente al conjunto azulón y pienso que es un acierto de Rafa Benítez. El daño está hecho y el jugador mientras forme parte del equipo debe sentirse respaldado.Jugador que paradójicamente no ha sentido el respaldo de Benítez y le ha condenado a un ostracismo significativo. Cuando los futbolistas están desconectados hay más riesgo que ocurran ciertas cosas y el desenlace ha sido trágico. La sensación que Denis puede ser quien pague los platos rotos crece en su entorno porque la factura ha sido bastante importante.
Lo que te ha quitado la mala gestión y los problemas administrativos solo puede «olvidarse» con el fútbol. Un tropiezo en Liga frente al Getafe puede servir para que las sombras alargadas tomen cuerpo en el Bernabeú. Eliminados de una competición antes de tiempo, el margen de error se reduce considerablemente. Indudablemente la mejor noticia para el Real Madrid esta semana es tener el partido contra el Getafe para intentar ganar y olvidar.Cristiano Ronaldo, Bale y el alicaído James tienen que liderar este barco para que vuelva a la superficie. Las heridas pueden cicatrizar, pero como decía «El Canto del Loco» nada volverá a ser como antes. Benítez, Chendo e incluso Jose Ángel Sánchez están en la diana de las críticas y será complicado que esta situación se olvide.
Es hora de pasar página y saber que todavía queda temporada para remontar el vuelo. La alineación indebida constituye un ejemplo de los problemas estructurales de la entidad. Los fallos son humanos, pero definir roles en el Real Madrid serviría para darle más sentido al ámbito deportivo. También se necesita ganar al Getafe, sellar la paz entre James y Benítez, recuperar a Bale y mucho más. La resaca debe cortarse a las 16,00 ante un Bernabeú dolido por el último episodio surrealista de su equipo. Hora de intentar olvidar aunque con la obligación de aprender una lección que ha costado un título.
