Miguel Lopes, durante el partido ante el Real Madrid.
Descompensación en defensa. Miguel Lopes llegó como refuerzo para el lateral derecho en el mercado veraniego para aportar experiencia, aunque con dudas respecto a su condición física, subsanadas a lo largo de la temporada. Mientras, como refuerzos para reforzar el lateral izquierdo, llegaron Salva Ruíz, cedido por el Valencia, cuya presencia en el once fue cuanto menos fugaz; y Cristiano Biraghi, cuya aportación se esperaba que fuese aquella de un jugador prometedor, tal como apuntaba, un diamante en bruto, algo que con el paso de las jornadas, ha quedado en una mera palabra, ya que la realidad es que deja bastante que desear como lateral izquierdo, defensiva y ofensivamente hablando en cuanto a su aportación se refiere.

Tal es la descompensación, que Foulquier, alternativa a Miguel Lopes en el lateral derecho, ha jugado varios partidos como titular en el lateral izquierdo, tratando con ello de paliar las carencias en el flanco izquierdo. Tal es esa carencia del equipo rojiblanco en esa posición, que se ha convertido en su principal punto débil, llegando gran parte del peligro generado por los equipos rivales por esa banda, además de convertirse en un hándicap en el momento de atacar. Una circunstancia que pesó y bastante en el último encuentro contra el Betis, y de la cual José González ha de hacerse cargo para evitar disgustos mayores en las jornadas que restan…





Artículo realizado por David Jesús García Leyva (@DavidGLeyva).