Saúl celebra un gol ante el Bayern en la Champions 15/16.
(FOTO: Getty Images).
Echa el telón el año 2016 y es momento de valoraciones. Momento de analizar las cosas positivas y negativas que dejan estos últimos 365 días y, como no, había que valorar el año del Atlético de Madrid. Un año que para unos ha sido “muy bueno”, como declaraban en estos últimos días algunos jugadores como Lucas Hernández, Saúl o Yannick Carrasco.
Sin embargo, esta es una de las últimas cuestiones que se preguntan los aficionados rojiblancos antes de comerse las uvas el próximo 31, ¿si el 2016 ha sido un buen año o no? 
Lo cierto es que aquellos aficionados que ven el vaso medio lleno, pueden argumentar que ha sido un buen año ya que los rojiblancos han cerrado el año con un buen balance en cuanto a victorias en el Estadio Vicente Calderón: 21 victorias, 5 empates y tan solo 2 derrotas. Además, se disputó el campeonato liguero hasta las últimas dos jornadas con los dos gigantes del fútbol español, se alcanzó la final de la Champions League -final que no hace muchos años se veía por la televisión-, después de eliminar a duros rivales como Barcelona y Bayern Múnich en las eliminatorias de cuartos y semifinales. 
Esta temporada, se han clasificado como primeros de grupo en la máxima competición europea, en un grupo donde el Bayern Múnich partía como máximo favorito a ocupar la primera posición. Y en Copa del Rey ha conseguido superar la primera ronda. 
Los jugadores rojiblancos tras perder la final de Champions.
(FOTO: EFE).
Por su parte, en el lado opuesto están los que ven el vaso medio vacío. Es decir, no consideran que este año haya sido un buen año para el club rojiblanco. Para ello, los motivos son que no se ha ganado ningún título este año, que se llegó a una final de Champions pero se perdió ante el Real Madrid, otra vez. 
Además, esta temporada no ha empezado todo lo bien que se hubiera deseado ya que en el campeonato liguero son muchos los puntos que separan al Atleti del líder del campeonato y las sensaciones no son las mejores. Por último, la polémica por el nombre del nuevo estadio y, sobretodo, el cambio en el escudo ha terminado por culminar un mal año para algunos aficionados rojiblancos.

Con todas las cartas sobre la mesa, ya cada uno sabrá si ve el vaso medio lleno o medio vacío, como se suele decir en estos casos. Aunque lo cierto es que desde dentro del club se ha defendido que ha sido un buen año aunque, eso sí, todos han coincidido en esperar que 2017 se mejor. Esperemos…