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Dicen que los héroes son aquellos seres que se distinguen por realizar hazañas extraordinarias, sobre todo cuando estas requieren de mucho valor, mientras que el antihéroe es aquel que tiene un comportamiento antiético caracterizado por un comportamiento antisocial e incluso pasivo. Pues bien resulta que muchas veces en el mundo del fútbol también según algunos “expertos” podemos encontrar esta clase de personajes o mejor dicho para algunos, unos jugadores son héroes y otros antihéroes, este es el caso de Lionel Messi para la Argentina y de Cristiano Ronaldo para Portugal.
La Argentina siempre se ha caracterizado por ser una tierra donde nacen los mejores jugadores de fútbol de la historia, incluyendo a Diego Armando Maradona quien desde la década de los 80 se convirtió en el héroe nacional tras consagrarse campeón del mundo en 1986, dándole así su segundo triunfo continental a albiceleste, logrando incluso repetir la hazaña de llegar a una final que luego terminarían perdiendo. Mientras que en Portugal realmente pese a tener jugadores de la talla de Figo, Eusebio o Deco, nunca han ganado un título hasta que llego el 10 de Julio del 2016, cuando un héroe inesperado, Eder, hizo el gol que puso en el olimpo del fútbol a los portugueses, pues su mejor héroe Cristiano había salido entre lágrimas en el minuto 21 cuando se dio cuenta que ya no podía más, tras el golpe recibido por parte de Payet, que no le permitió continuar en la cancha.
Cristiano consiguió para su nación lo que parecía imposible, un título con su selección algo por lo que habían luchado por más de 100 años de historia convirtiéndose en ese súper héroe que siempre habían esperado. Algunos dirán que se trata de un poco de suerte por aquello del camino fácil que tuvo Portugal pero no importa, acá lo realmente importante es que lo lograron, algo que lamentablemente, en los últimos años exactamente en 3 ocasiones , Argentina a la cabeza de Messi no lo ha podido lograr, porque quizás le falto esa pizca de suerte con la que contaron los lusos, y es por eso que para algunos es considerado como el antihéroe; por no hacer lo que sí pudo hacer Maradona, quien quizás contaba con mejores socios o sencillamente fue cuestión de suerte, quien sabe, pero créanme que un antihéroe no puede ser aquel que derrama lágrimas por no poder ayudar o por errar el penal del título.
Señores en el fútbol no existen los antihéroes, existen los héroes que siempre que ingresan a la cancha, lo hacen con el simple propósito de consagrarse campeones con su club o con su selección; en este caso tanto Leo, como Cristiano, lo son y nosotros somos testigos que con su magia se convierten en los Superhéroes de niños y adultos.
Maria Alejandra Camacho Elias
