Tenemos el enorme placer de hablar con uno de los nombres propios de nuestro panorama futbolístico. Vidales ha consagrado su vida, en cuerpo y alma, a este deporte con el que nos levantamos y acostamos cada día. Un luchador dentro y fuera del campo y que ahora conoceremos un poco mejor.

Empezó su carrera deportiva como jugador de los filiales del Real Sporting de Gijón. ¿Sabía ya que este deporte sería su vocación?

Desde muy pequeño a pesar de no tener raíces familiares futbolísticas dormía con una pelota, el día que me lesioné hasta el hígado se me bloqueó. Ese día fue muy duro, pero fue el comienzo de mi vocación, entrenar.

Mareo es mi casa de toda la vida, ojalá pudiera volver; es algo prioritario para mí” - La Nueva España

¿Por qué abandonó tan pronto su faceta de jugador?

Por la lesión de la triada.

¿Cuál es ese recuerdo imborrable de esta etapa?
Mis 2 últimos años como juvenil, donde compartía equipo con mi hermano.

¿Cuándo decidió entrenar?

Nada más que supe el alcance de la lesión intente curar el daño moral poniéndome a dirigir.

Como mejores logros como entrenador, a nivel categoría, han sido sendos puestos de segundo entrenador en el Sporting y en la UD Las Palmas. ¿Qué significó para usted ejercer este puesto?

La experiencia más importante ha sido a nivel de responsabilidad, mi función 3 años como secretario técnico de la Unión Deportiva Las Palmas. Y una como entrenador principal en este club, uno de los más importantes en el panorama del fútbol español.

También los 10 años que estuve trabajando en el Real Sporting de Gijón pasando por todas las categorías y culminando como director de formación y metodología de la Es- cuela de Futbol de Mareo, su mayor exponente. ¿Aprendió más en esta primera categoría, o por el contrario, es en las inferiores donde está la esencia del buen fútbol?

La esencia del fútbol, es más, su pureza está en el fútbol base, es ahí donde lo único realmente importante está en el fútbol pues es el niño el auténtico protagonista.
Del fútbol profesional saqué algo fundamental para lo que luego debía hacer en la base.

Tener claro aquellas cosas por las que jóvenes que parecían tener todo para ser profesionales se quedaban a un paso, con ello cree una metodología en un ciclo de unos 8 años para que no se quedara nada en el camino formativo.

Finalmente se reincorporó a la disciplina de la Escuela de Fútbol de Mareo, escuela que ya conocía de primera mano. ¿Cómo vivió este regreso?

Una de las mayores alegrías, ver que nada más terminar un ciclo de mi trabajo fuera de casa el club que me formó volvió a acordarse de mí, ese fue el mayor regalo que me pudieron hacer.

¿Qué logros ha cosechado en esta Escuela?

Estar tantos años en una escuela de ese nivel ya es algo muy importante, si además cada año que pasaba el club me subía de categoría mucho más. Son muchos los futbolistas profesionales que pasaron un periodo de su formación a mi lado, esa es la mayor satisfacción. Como campeonato siempre tengo en el recuerdo el torneo inter club de primera división representado por todos los filiales en categoría alevín, en el cual quedamos campeones.

¿Cuál fue su jugador destacado o aquel que ha llegado a lo más alto?

A Salomón Rondón vine a Venezuela a ficharlo como secretario técnico de Unión Deportiva Las Palmas para luego ser su entrenador.

A Mauro Icardi lo tuve en la unión deportiva vecindario de gran canaria.

A Alex Gálvez lo tuve entre muchos otros en el real sporting de Gijón. A Nacho Cases y muchísimos compañeros suyos en el Real Sporting de Gijón.

Cómo responsable del Área de Metodología y Formación ¿A qué dedicaba la mayor parte de su tiempo de trabajo?

A tutorear la metodología en todo momento. Después de haber preparado a cada entrenador de cada categoría para encontrar el mejor desarrollo posible en cada etapa de la formación.

¿Para usted prevalece la teoría o la práctica, a la hora de dar forma a un equipo?

Como todo en la vida dominar la teoría facilita la práctica.

¿Cómo es el día a día de un metodólogo?

El mío es preparar o examinar los contenidos de cada sesión, de cada micro cicló por las mañanas. Reunirme a continuación con los entrenadores para repasar lo que vamos a hacer. Luego tener un seguimiento directo de lo que se está haciendo y por ultimo mantener un constante intercambio de opiniones con los entrenadores.

¿Qué le caracteriza a la hora de entrenar al equipo?

Todo lo que pretendo ver en el equipo se trabaja.

¿Trabaja más la individualidad o al grupo?En cada tarea se trabaja al futbolista

sin dejar de trabajar el equipo y viceversas.

Es por eso que mi metodología tiene como bastión principal el contextualizar todo lo que se va hacer.

¿Es usted de los que les gusta “experimentar” con las posiciones de los jugadores, o es de los que cree que cada cual en su sitio?

Si quiero mejorar una acción técnica o táctica en un jugador de un puesto determinado y veo que en otra posición esa acción se repite con asiduidad lo hago para que a través del propio juego la mejore.

¿Cuáles son sus ejercicios preferidos sobre el campo a la hora de enseñar a los jugadores? ¿Cuáles cree que son los más eficaces?

Todos aquellos que están basados en el propio juego. Capturo secuencias y las desarrollo.

Ya para terminar, hablemos de qué planes de futuro tiene para usted en mente ¿Seguirá en este sendero o abrirá puertas?

En mi carrera he ejercido como entrenador en la base, como entrenador profesional, como secretario técnico, como director metodológico y ahora como director general.

Esta última fase aglutina todas las anteriores. La verdad que uno no sabe, pero esta última experiencia me está marcando muchísimo. Es como si lo anteriormente vivido ahora pueda revertirlo para formar a niños que tienen el fútbol como doctrina para su vida de adulto.

Agradecerle enormemente en nombre de la Dirección de la revista, su tiempo y su amable atención. Le deseamos muchos logros en su carrera y esperamos volver a vernos en otra ocasión. Un saludo.